Ir al contenido principal

Aprendiendo a vivir y recordar sin Culpas

A través del tiempo  vamos creando ideas  sobre acciones y conductas que comenzamos a juzgar desde la madurez actual que hemos adquirido. Debemos recordar que al a travesar por relaciones y eventos  que ante nuestra percepción son injustos o dolorosos se generan cambios importantes en nuestras estructuras del cerebro.  Cada uno de nosotros vamos a mostrar una sensibilidad  especial para evitar aquellos sentimientos que nos generan vergüenza, temor y rechazo.  A si mismo vamos a tratar de mantener vivos aquellos recuerdos que nos generan enojo o dolor como forma de generar una cobertura protectora ante la situación o persona que a nuestro entender es el o la responsable de nosotros sentirnos de esta forma.
Ahora bien, necesitamos con urgencia dejar el vicio psicológico de Re-Sentir es decir volver a revivir o reanimar sentimientos de dolor, coraje, frustración o vergüenza que hemos experimentado en un pasado remoto.  Por ejemplo, muchas personas se sienten decepcionadas por la ejecución de sus padres y madres en la infancia y aun en su adultez tardía sienten con potencia la ausencia afectiva o falta de aprobación de sus progenitores. Esto lo que genera es mucha disfunción psicológica en el presente inmediato, dado a que es un dolor que se observa desde el presente hacia el ayer siendo el mismo distorsionado y matizado por la posición desventajada del poder y la posición desde en lo experimentamos por ejemplo  las relaciones de padre –madre e hijo.  

Igualmente, decisiones de pareja, tener o no tener hijos,  decidir una carrera se tornan en nuestras enemigas en el presente simplemente porque no sentimos satisfacción por lo que tenemos.  Esto se debe a que tendemos a crear un fantasma idealizado de lo que pudo ser, y obviamos como omitimos nuestra mente que toda ruta que tomemos en nuestra vida nos dará en ocasiones satisfacción y en otras instancias insatisfacción. 

¿Cómo lograr mirar hacia atrás sin que esto no nos genere grandes dosis de ansiedad y  arrepentimiento?

 El ejercicio de mirar hacia atrás en la vida es decir hacer un proceso retrospectivo de nosotros mismo, debe cumplir un propósito central de exploración curativa.  En otras palabras es mirar para hacer una deconstrucción de los eventos, personajes y contextos que vamos a recordar no para autodestruirnos sino para conocernos mejor.  El error que todos en algún momento hemos cometido es mirarnos de nuestra madures actual y pretender que esa madurez  se traslade a aquel niño que fuimos al joven que probablemente nos y los evento del pasado.

   Para no caer en esto necesitamos aprender  la siguiente clave:  Cuando recordamos   es como si estuviéramos viendo imágenes  que nos van a generar emociones  es como crear una película mental y subjetiva, llena de fallas  por falta de detalles especiales que probablemente no tenemos dado a que solo recordaremos desde un solo punto de vista.  Es como si nuestra mente tuviera solo una cámara, y micrófono  que está grabando para un solo ángulo y con un solo actor principal que somos nosotros mismos.  A medida que somos pequeños vamos a tener una cámara mental pequeña,  la cual no sabemos utilizar muy bien y en la que todo se va a ver distorsionado, magnificado y dramático. Cuando vamos creciendo y  madurando en ocasiones nos arraigamos a estas aquellas viejas  imágenes mentales de nuestro entorno y las cuales nos hacen creer que esta es la única realidad.  
Entonces a medida que nos vamos haciendo mejores camarógrafos de nuestra existencia podemos tomar más información; refinamos lo que vemos, percibimos y sentimos. Mientras más vamos comprendiendo que cada situación en nuestra vida es solo una experiencia, y que “NO” define quienes somos del todo sino más bien  que vamos delineando levemente algunas áreas de nuestra vida podemos estar más en paz con nosotros mismo.

La ansiedad, el miedo, el rechazo pero sobre todo la culpa son solo emociones.  Es decir cosas que sentimos y que podemos lograr aprender a manejarlos aprendido a desarrollar conciencia e inteligencia de nuestro estado interno.  El arrepentimiento solo debe darse en un contexto de compasión tanto para con nosotros como para con otros, entendiendo que la culpa es un sentimiento inicial que si permitimos se quede mucho tiempo con nosotros nos aplasta.  Por tanto, la culpa debe ser solo al inicio y se debe de generar una acción afirmativa y correctiva determinante en nuestra vida.  Es decir si la responsabilidad es con otros y es irreversible el acto implica  que debes alejarse completamente de aquello que hace daño para  ti como para otros.  Si la emoción de culpa es con nosotros misma, es sumamente importante que se cree una visión balanceada de cada uno de los actos, pensamiento y sentimiento experimentados dado a que probablemente estamos mirándonos sin compasión.  Tenemos que aprender a ser compasivos primero para con nosotros y luego para con otros.  Entendiendo que el arte de ser  compasivos es tener empatía  y dignificar a nuestra propia persona y la  de los otros.  En  otras palabras es darnos valor y aprender que siempre actuamos según la información que entendemos que es la más correcta o apropiada en el momento que actuamos.

 ¿Qué debo tener en cuenta para lograrlo?  

·      No traslades tu madurez actual al pasado, lo que sabes ahora es producto de tu experiencia en el momento presente.·        Cultiva la compasión constructiva·        No hagas juicios valorativos que solo incluyan un solo punto de vista. Evita pensar en polaridades blanco o negro.·        Observa el contexto de tiempo en el que paso el evento. Para de sufrir por el pasado estás perdiendo la oportunidad de hacer hoy en tu presente las forma adecuada.·        Libérate de expectativas rígidas, siempre hay oportunidad de aprender una nueva manera de hacer todas las cosas.·        Se flexible contigo mismo, vas a cometer errores es decir en ocasiones no lograr lo que quieres y eso no significa que es el final.

Es normal sentir culpa sobre lo que hicimos o dejamos de hacer? ¿Cómo valorarlo  a la luz de lo que sabemos ahora?

   Sí es normal, sentir todo el espectro de emociones desde culpa, vergüenza, envidia, coraje, frustración, ansiedad, amor, felicidad, calma, optimismo.  Pero recuerda las emociones son parten de nuestro cerebro y están para ayudarnos a recordar cual es nuestro estado interior no para dominar toda nuestra conducta. Recordemos, que igual que sentimos también pensamos y nuestras ideas nos pueden ayudar a balancear o potenciar esas emociones. Necesitamos aprender a educarnos  y sentir de manera constructiva, centrada y positiva.   Nunca y eso significa nunca  realicemos juicios sobre como actuamos en el ayer en base a aquello que ahora sabemos.    Porque  esto es  como si tratáramos de darle a un niño de kínder un examen universitario y esperemos que saque A, el niño no lo va a poder hacer no porque no tenga el potencial en el futuro sino por falta de conocimiento y la madurez que se requiere para lograrlo. Igualmente, nosotros no podemos, ni debemos pasar juicios duros contra nosotros mismo u otros por no tener aprendizajes, modelajes y experiencias para manejar esta gran aventura de vivir.

 ¿Cómo redescubrir o aprender a vivir con menos estrés  y atrevernos a tomar riesgos por temor a arrepentirnos?

 Vivir sin duda requiere de emociones positivas, neutrales y negativas es un hecho que tenemos que aceptar, por tanto vemos nuestra vida como una gran manifestación de sentimiento y pensamientos que se necesitan mutuamente como una rueda de color. Cada combinación de emociones y pensamiento nos permitirá crear nuevas manifestaciones que en la vida humana se llaman experiencias. Esas experiencias están constantemente interactuando y creando zonas más claras y otras más tenues que definirán como existimos en esta realidad que nos ha tocado.  Tratemos entonces de que nuestra obra maestra de vida sea algo que nos haga sentir en paz con los diversos trazos que hemos ido construyendo desde nuestra infancia hasta el momento de nuestra partida  transformación y transcendencia de esta vida.






Comentarios

Entradas populares de este blog

La Terapia de Conexión Sensorial para la pareja

Por: Dra. Naychaly Rivera Nieves Psicóloga Consejera, especialista en parejas PIENSA Psicología Innovadora www.piensapr.com | 787.667.9359 La Terapia sensorial en parejas tiene como objetivo central  lograr que las parejas se aprendan a conocer a profundidad a nivel sensual, erótico y sexual de manera positiva y afectiva.  La premisa básica de este enfoque es que “sistemáticamente nos centramos en sentir de manera  focalizada cada uno de nuestros sentidos”. Esto implica poder maximizar el conocimiento y sensibilidad del sentido del gusto, el olfato, el tacto, la audición y la visión a través de afinar nuestra percepción en cada uno de ellos. Como se trata de afinar nuestros sentidos, es necesario que podamos cumplir con tres reglas claves que provienen de las antiguas sabidurías del tantra. Estas claves son: No tener prisa o urgencia,  No sentirnos forzados a nada y buscar la prolongación de nuestro disfrute. Esencialmente cada uno de nosotros tenemos un lenguaj

La Baja Autoestima en el Ser Humano

Por: Dra. Naychaly Rivera Nieves Para entender qué es la baja autoestima tenemos que comprender en primer lugar qué es y cómo se desarrolla lo que conocemos hoy en día como autoestima. El concepto autoestima es uno que pueden tener un valor o significado distinto según sea la sociedad a que pertenezcamos. Igualmente su significado va a variar según la cultura, crianza y experiencia con la vida que hayamos experimentado. En las culturas orientales se suele dar un mayor valor a al ser humano no como individuo independiente sino visto como parte de la sociedad o de un grupo. Por esta razón en las culturas orientales no suele estimularse el concepto de autoestima pues se considera un concepto individualista. Por el contrario, en occidente se rinde culto al individualismo y se patrocina el   componente del individuo como ser independiente. Es importante comprender esta diferencia ya que el ser humano desarrolla su personalidad en un contexto particular. Estas experiencias e interacci

El termómetro de la Confianza

          La confianza es la manifestación constante de acciones que ofrecen bienestar y seguridad a otra persona.   A sí mismo, la confianza no implica un estado único e inamovible sino que a través del tiempo da paso a que pueda   ser mayor o menor según las actitudes y ejecuciones realizadas   a la luz de los pedidos o ideas de quien la extiende.   Es importante establecer que la confianza no es fe.  La fe puede ser definida como la creencia en algo invisible, por decisión propia e implica a su vez la subjetividad interior sobre la experiencia de que   algo o alguien es superior y perfecto; el cual no cometerá actos que puedan lastimar   la persona sino que por el contrario todo actuará para el bien de la misma persona o  situación .  Ahora bien, este concepto no se ajusta a la realidad de la existencia entre dos seres humanos los cuales cambian constantemente de deseos, emociones y pensamientos.  Nuestra humanidad nos hace sentir miedo o inseguridad ante aquell