Por: Naychaly Rivera Nieves
Psicóloga Consejera
Centro Piensa Psicología Innovadora
Perdonar en un proceso continuo que no
significa olvidar, más bien, es una acción que te da la oportunidad de vivir
libre. Esta libertad implica ir en contra
de la reacción natural de venganza y búsqueda de justicia ante la persona o
situación que piensas y sientes que te ha hecho daño. El dolor que te han
ocasionado o el agravio se convierten en una prisión de amargura, desconfianza,
dureza y juicio constante; que dentro de ti se torna en un tóxico estilo de
vida. Tu vida se torna en un sufrimiento por la necesidad del ojo por ojo y
diente por diente, respiras ira, te alimentas de frustración y tus días son una
agonía lenta, que solo se dirige a la muerte de las relaciones importantes de
tu vida.
La psicología, define el perdón como un cambio
del patrón de conducta, destructivo y tóxico hacia ti y la otra persona o
evento, a través de un movimiento emocional consciente en dirección a la construcción
de un patrón de conductas edificantes para ambos. Implica abandonar el negativismo, disminuir
la frecuencia de revivir los eventos o ideas que te evocan dolor y comprometerse
con un interés genuino de ser una mejor persona. Perdonar, nada tiene que ver
con conceptos religiosos u olvidar todo.
Perdonar, es lentamente comprometerte a tu
propósito de verdaderamente ser libre de la ofensa y la aceptación de tu propia
humanidad imperfecta. Es así que comienza a nacer en ti una fortaleza emocional
que te hace transcender este, u otros eventos, es de aquí que nace tu primer
paso hacia el perdón. Inicias así un viaje
hacia evitar pensar una y otra vez en la falta, entendiendo que ninguna falta
es tan grande como para permitir que esta te destruya. De esta forma, eliges una nueva posición, ya
no eres víctima, no estás preso del dolor, abandonas la autodestrucción como forma
de vida.
Debemos reconocer que perdonar no es la
restitución inmediata con la persona que ocasiona el evento doloroso, mucho
menos la idea de borrón y cuenta nueva, es más bien, el inicio gradual de una
relación nueva con nuevos compromisos y exigencias. Esta nueva interacción con
la persona requerirá de tiempo, tolerancia y aceptación mutua. A través del
compromiso contigo mismo como la demostración constante de acciones positivas y
constructivas de la otra persona es que se consolida de manera natural la
acción reparadora y liberadora del perdón.
Algunas
guías para comenzar a sanar activamente y perdonar desde hoy:
Paso
0: Hacer del Perdón un valor fundamental en tu vida.
·
Internalizar
el perdón como paso hacia un nuevo estado emocional.
·
Decidir
activamente, actuando física y emocionalmente de manera cónsona con tu
compromiso de perdonar.
·
Aceptar
la disculpa inicial.
Paso
1: Apertura y honestidad de reconocer que estás lastimado
·
Reconocer
las áreas lastimadas en tu interior tu auto concepto, estima, confianza en ti u
otros
·
Identificación
del contexto en el que ocurrieron los eventos o situación.
·
Aceptar
el dolor y no tratar de ocultarlo.
·
Permitirte
la idea o emoción de ira y deseo de venganza, más no actuar o ejecutar la
conducta.
Paso 2: Decidir de manera consciente la dirección de la relación interpersonal
·
No
alimentar un tipo de relación de víctima y victimario.
·
Definir
los nuevos términos en los que se va a dar la relación.
·
Negociar
con la persona concretamente cual va a ser el curso de acción cuando se tenga
una recaída emocional. Ej. ¿Qué espera que esa persona haga?
Paso 3: Construir y no destruir
·
Reafirmar
activamente la decisión de construir una nueva relación.
·
Aceptar
y reconocer las acciones correctivas de la otra persona.
·
Dar
valor de forma constante a la sensación y emoción de estar cada día más sano y
libre.
·
Reconocer
la capacidad innata del ser humano para transformar la adversidad en una
experiencia de crecimiento en la vida.
Estos son los pasos iniciales hacia la libertad
emocional y la decisión activa de perdonar. En otras palabras, no es un proceso
rápido instantáneo ni mucho menos podemos sentarnos a esperar que ocurra
espontáneamente. Simplemente, el perdón
es un proceso que requiere estamina emocional, esfuerzo y un real deseo de
vivir una experiencia transformadora. La experiencia del perdón, requiere
reemplazar la ira y coraje por valentía para afrontar los errores de otros sin
permitir que esto se convierta en una venganza o agenda interior de hacer daño. Para ello se necesita reconocer y reavivar las
experiencias positivas que se ha vivido junto a la persona o situación de
vida por la cual has pasado. Entendiendo,
que volver a confiar no es un acto de fe, sino acciones constantes que
demuestren una verdadera entrega para contigo y la relación, o evento en tu
vida. La garantía de una mejor relación
interpersonal se sustentará en que se trabaje activamente en una nueva forma de
relacionarse.
La
decisión de pedir perdón
La decisión de pedir perdón implica asumir las
consecuencias directas de tus actos o descuidos. Implica directamente ser honesto, hablar con
la verdad por más dura que sea la misma y hacer un desfile hacia la pasarela de
la sinceridad. Debes entender, que has
lastimado duramente a la otra persona, y que su efecto es como un gran
terremoto emocional para la otra persona que por un tiempo prolongado estará
luchando con el dolor y la desconfianza. Envuelve un total arrepentimiento y
abandono de la conducta que ocasiono el daño. Requiere demostrar tu dolor, tu
falta y tu deseo de cambio con humildad. Necesitas pasar por un proceso de
analizar tu conducta, y detectar cuales pueden ser posibles fallas
estructurales de la relación o situación que propicio que cometas el error. Es de importancia ser responsable con tus
recursos emocionales y no pretender que la otra persona te trate de la misma manera
que antes, sino más bien, debes fomentar una interacción saludable, nutritiva y
comprometida con la restauración de ambos.
Guías
practicas para pedir perdón:
·
Destruye
totalmente el vínculo o lazo con aquello que te hizo cometer la falta.
·
Sé
honesto, tienes que decir toda la verdad en un mismo momento.
·
Expresa
de forma pausada tus sentimientos y estado emocional antes del evento o error.
·
Define
tu plan de acción para demostrar activamente que no volverá a ocurrir.
·
Abandona
toda conducta autodestructiva y mas allá de sentirte culpable; sé responsable
de tus acciones.
·
Pide
perdón no como un acto sin significado, sino más bien, como un proceso continuo
que se irá completando a través del tiempo.
·
Restituye
el daño de forma continua, sin agotarte o desesperarte. Ten paciencia.
·
Afronta
los efectos de tus acciones para buscar el crecimiento en las áreas de tu vida
que hacen falta.
·
Has
un compromiso con la transformación total de tu relación interpersonal, que
impliquen cambios trascendentales a la forma en que antes vivías.
·
Entiende
que recibir el perdón, implica también perdonarte a ti mismo y perdonar a
otros.
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